La primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, ha defendido la “libertad de expresión” en su país y ha rechazado pedir perdón tras la publicación de unas caricaturas sobre el coronavirus de Wuhan, que ya ha provocado la muerte de 132 personas en China. Los líderes de varios partidos de todo el arco parlamentario también han coincidido en afirmar que el diario no debe disculparse y han criticado las “presiones” de Pekín.
La viñeta satírica, publicada este martes por el diario danés Jyllands-Posten, mostraba una bandera china en la que se sustituían las cinco estrellas amarillas por otros tantos dibujos del virus, lo que el Gobierno de Pekín ha visto como un “insulto” que “hiere los sentimientos” de su pueblo.
“Sin ninguna empatía ha traspasado la línea de una sociedad civilizada y los límites éticos de la libertad de expresión, ofende a la conciencia humana. Expresamos nuestra indignación y exigimos que Jyllands-Posten y Niels Bo Bojesen (el autor) se autoinculpen y pidan perdón públicamente al pueblo chino”, aseguró en un comunicado la embajada china en Dinamarca.
El periódico conservador danés ha rechazado pedir perdón y asegura que su intención no era ofensiva. “No podemos disculparnos por algo que no creemos equivocado. No tenemos ninguna intención de burlarnos, tampoco pensamos que la viñeta lo haga. Tal como yo lo entiendo son dos formas distintas de comprensión cultural”, señaló en declaraciones al diario su redactor jefe, Jacob Nybroe.
El brote de neumonía causada por un nuevo coronavirus en China ha dejado ya al menos 132 muertos y 5.974 casos confirmados, cifra esta última que supera ya a la registrada en el gigante asiático entre noviembre de 2002 y julio de 2003 durante la grave epidemia del síndrome respiratorio agudo y grave (SARS).
Las controvertidas caricaturas de Mahoma
Jyllands-Posten ya sembró la polémica en septiembre de 2005 al publicar doce viñetas de Mahoma, incluida una muy polémica del profeta con un turbante-bomba, que meses después provocaron un conflicto político entre Dinamarca y el mundo islámico, que incluyó ataques a legaciones danesas y un boicot comercial a productos de este país nórdico.
Tanto el diario como el Gobierno danés rechazaron entonces las exigencias de pedir disculpas de varios países islámicos, apelando a su derecho a la libertad de expresión.
29. de enero de 2020